¿Necesita el director un coach de actores?


Sí, aunque no es un sí rotundo. Muchísimos directores trabajan los personajes de su proyecto con los actores en forma personal y directa, entendiéndose por supuesto que son poseedores del conocimiento necesario, pero a pesar de esto último también hay otro grueso numero de cineastas que por estar cumpliendo doble rol como «director y productor» delegan el nacimiento y crecimiento de cada uno de los personajes en un coach de actores. 

Otros directores que en su formación no tuvieron la oportunidad de contar con Dirección de Actores como asignatura formal o taller libre, por ende han tomado la acertada decisión de contar con un coach en función de lograr una producción que cumpla con los estándares de calidad que necesitan. 

Para un director novel es normal que la idea de buscar la ayuda de un coach despierte algún recelo o temor dado que puede invadirlo la creencia de que aquel terminara queriendo dirigir su película lo cual en lo sucesivo se dará cuenta de que tal cosa está totalmente alejada de la realidad. 

El coach es otra mano derecha para quien dirigirá, su trabajo es previo al rodaje al cual asiste solo para asegurarse de que todo salga tal como se preparó con la venia del director. Su trabajo comienza analizando toda la historia a ser contada a través del argumento y guión, conociendo a los personajes tal como fueron concebidos por el autor para luego elaborar intrínsecamente la personalidad de cada uno de ellos desde su nacimiento hasta la edad contemplada, de esa forma director y coach podrán posteriormente llamar a casting con una base solida que se verá enriquecida con los aportes que los actores le adicionarán durante los ensayos. En ocasiones el director tiene en mente a un tipo especifico de persona para interpretar a un personaje pero el coach le hace ver que escogerlo por su tipología puede resultar contraproducente y que es más conveniente optar por quién alcance el mayor porcentaje de acercamiento al mismo ya que las características físicas que se necesiten pueden lograrse con otras fórmulas. A un actor o actriz no debe decírsele como actuar, no puede pedírsele “que lo haga como aquel o como el otro” ya que éstos saben qué hacer y claro está, como los pasajeros de un avión o un barco necesitan de un piloto o capitán que los oriente sobre quién es el personaje, de donde viene, donde está y hacia dónde va, rol que puede cumplir cualquiera de ambos pero final e ineludiblemente la puesta en escena siempre corresponderá al director(a) quien de acuerdo a sus circunstancias y posibilidades tiene la opción de realizarla óptimamente en ahorro de tiempo y derroche de calidad. 

Autor:
Alfredo Leal

Coach de actores para cine y tv. Director, escritor y productor cinematográfico.

La Mirada de HAL es un espacio de opinión sobre cine. El blog de Iribarren, como una contribución al desarrollo de la cultura cinematográfica, ofrece este medio para el planteamiento y la discusión de ideas con relación al séptimo arte. Sin embargo, las opiniones emitidas en este espacio son responsabilidad únicamente del autor.